Pandilla los Clickers CK atemorizan en Alto Lima y matan a un chofer


El Alto, ago 18, 2009.- Ocho integrantes de la pandilla los Clickers CK fueron aprehendidos por la Policía el viernes alrededor de las 23.30, después de que éstos presuntamente asesinaran a David Callisaya Mamani (33) en la calle Sucre de Alto Lima, Tercera Sección, en la ciudad de El Alto.

Esta banda causaba temor en esa populosa zona alteña, según el director de la Fuerza Especial de Lucha Contra el Crimen (FELCC) de El Alto, coronel Ramiro Cossío.

La víctima, quien dejó tres huérfanos y una viuda, se encontraba en su casa la noche del viernes reciente, cuando debió salir en busca del hermano de su esposa. Lo hizo en compañía de su sobrino y sus dos hijos de nueve y 16 años.

Al llegar a una de las esquinas de la calle Sucre, tres jóvenes salieron de un bar y agredieron a los transeúntes. Callisaya Mamani, de acuerdo con el reporte policial, pudo defenderse del ataque de los tres, pero uno de ellos lanzó un silbido y otros cinco llegaron al lugar para reforzar la violencia.

El hombre emprendió la huida, pero tropezó y cayó al piso, hecho que los jóvenes aprovecharon para darle alcance y patearlo. Uno de ellos, presumiblemente Miguel Ángel Q.P., de 15 años, desenfundó un arma blanca y le asestó dos puñaladas. Una en la cabeza y otra en el corazón.

Como consecuencia de las heridas, Callisaya Mamani murió cuando era trasladado a la Clínica Complejo.

Cossío informó que los atacantes no tuvieron tiempo para huir, pues una unidad de Radiopatrullas que efectuaba una ronda de rutina por el lugar y sus oficiales pudieron capturarlos.

Se cree que los muchachos ya no tenían dinero para beber y salieron en busca de víctimas para costear su borrachera. Las edades de los ocho pandilleros varían entre los 15 y 18 años. Efectivos policiales los presentaron públicamente en la sede de la fuerza anticrimen alteña.

El jefe policial explicó que se investiga si estos jóvenes cuentan con antecedentes penales y exteriorizó su preocupación por la escasa edad de los presuntos malhechores.

Miguel Ángel Q.P., de quien la Policía sospecha que se trata del líder de la banda, será acusado de homicidio, aunque todavía no es imputable y no será procesado por un juez penal.

El Código Niño, Niña y Adolescente establece que los acusados comprendidos entre los 12 y 18 años cumplidos deben comparecer ante un juez de la Niñez y Adolescencia.

La Policía halló que Miguel Ángel Q.P. tenía escondida entre sus ropas un arma blanca, la que pudo haber causado la herida mortal al atracado.

Según El Alteño, la viuda, Gregoria Cori, se pregunta qué será de ella y sus hijos, ya que el fallecido mantenía el hogar con su trabajo de chofer.

La mujer refirió que sufre un mal en las articulaciones, por lo que no puede trabajar. “Mi esposo era bueno, no tenía amigos, no era tomador, se esforzaba por sacarnos a mí y a mis hijos adelante. Por suerte no los han herido a mis hijos y a mi sobrino, porque ellos lograron escapar, pero no mi pobre esposo”.

Los jóvenes delincuentes procuran ampararse en su edad para evadir una sentencia. Los restos de Callisaya Mamani serán sepultados esta mañana.

“Todo comienza en el colegio”

El sociólogo y experto en seguridad ciudadana en la ciudad de El Alto, Juan Yohnny Mollericona, explicó que el fenómeno de las pandillas delictivas comienza en colegio y se ha convertido, dado que la población alteña es joven, en “un fenómeno incontenible”.

“Estamos en una etapa de consumo cultural. Llegan videos y películas de afuera que no sólo dejan sus nombres para ser imitados, sino que muestran normas de conducta”.

En los centros educativos se forman grupos de dos o tres amigos que comienzan a enfrentar a otros. Los núcleos iniciales se convierten en líderes. Comienza la exacción de dinero a otros. Las víctimas se reúnen para defenderse y se genera un círculo vicioso que difícilmente podrá ser refrenado, en opinión del analista.

Los jóvenes, que forman parte de una segunda generación de inmigrantes, son más susceptibles de seguir ejemplos importados, tales como los ofrecidos por las “maras” centroamericanas.

La Policía, anota Mollericona, tiene registrados más de 500 grupos juveniles, aunque no todos se dedican a delinquir, pues los hay dedicados a practicar deportes, danza, actividades teatrales, culturales, recreativas y otras.



Los detenidos

Nombre Edad

David P.H. 18

Juvenal Lizón H.S. 15

Beycker Q.N. 18

José Alberto S.A. 16

Érick Christian C.A. 15

Ronald Rodrigo P.L. 18

Jorge Luis C. 15

Miguel Ángel Q.P. 15

De acuerdo con el Código Niño, Niña y Adolescente, los menores de 18 años serán procesados por un juez de Niñez y Adolescencia, en tanto que los de 18 o más serán sometidos a la acción de un juez penal. Si los menores fueran encontrados culpables, cumplirán sus sentencias en hogares hasta cumplir 18, cuando serán transferidos a cárceles ordinarias. (La Prensa)

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